¿A que es frustrante estar toda la mañana delante de la
pantalla sin ver un movimiento claro para poder entrar?
La respuesta claramente es que sí, ya que te levantas
pensando ¿cuánto ganaré hoy? Pues bien amigos hay que tener precaución con esta
sensación, porque ya conozco a más de uno que se ha tirado toda la mañana
mirando las pantallas sin operar y al final de la mañana ha cometido el peor
error que se puede cometer. Entrar en una operación por ansias de operar y de
ganar.
Esta sensación suele ser común en los más novatos, por eso
te la cuento, porque a mí me ha pasado miles de veces.
Levantarte pronto por la mañana y empezar a mirar las
pantallas, pasan y pasan las horas y los mercados no dan una definición clara, índices
en paralelo, movimientos pequeños y sin volumen, señales falsas de los
indicadores.
Y todo esto pues desespera un poco la verdad, porque estamos en
este mundo para hacer dinero del dinero y no para estar sentados toda la mañana
delante de un par de pantallas sin poder hacer ninguna operación.
Van pasando las horas y el gráfico sigue avanzando
malamente, hasta que llega un momento que coges una señal de un indicador y
decides entrar, por el ansia de hacer algo productivo esta mañana. Y lo único
que haces es estropear la mañana, por se suelen coger señales que no están
confirmadas, el gráfico se pone en tu contra y la única decisión que has tomado
en toda la mañana ha sido la de perder algo de dinero.
Y amigos sé de qué hablo,
es mejor no ganar nada a perder algo.
Por eso lo mejor que puedes hacer en estos casos es cerrar
el terminal de operaciones y dedicarte a hacer otras cosas más productivas, por
que ten en cuenta que el mercado no va a cambiar para que tu operes. Así que lo
dejas de lado y respiras tranquilo, lo que puedes hacer es mirarlo en un par de
horas o por la tarde a ver si sigue igual. Y sino hasta el día siguiente.
Recordar “Una retirada a tiempo, siempre es una victoria”
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